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Conocido por sus pintorescos paisajes recreativos y sus pintadas casas de madera, Appenzell es una joya escondida en el corazón de Suiza. Aquí te contamos todo lo que necesitas saber para explorar este destino increíble con un coche de alquiler.
Appenzell no tiene un aeropuerto propio, pero se puede acceder fácilmente a través del cercano aeropuerto de Zurich. Desde allí puedes recoger tu coche de alquiler y comenzar tu aventura. Solo recuerda verificar las normas de la compañía de alquiler sobre la entrega de coches en otros lugares si planeas volar por un aeropuerto diferente.
Appenzell es famoso por sus extensas colinas verdes, típicas arquitecturas pintadas, y los peculiares bacones floridos. Te recomendamos que dediques algo de tiempo a explorar el pueblo a pie. No dejes de visitar la Iglesia de St. Maurice, el Museo Appenzell, o simplemente disfruta de las pintorescas vistas que ofrece la magnífica Plaza Landsgemeinde.
Para las sinuosas carreteras montañosas de Appenzell, un coche compacto es la opción más adecuada. No solo te será fácil maniobrar, sino que también encontrarás más opciones de aparcamiento en el pueblo.
Con tu coche de alquiler puedes fácilmente visitar las áreas circundantes. Observa la espadaña de la Abadía de Einsiedeln que se alza en los cielos o maravíllate con las vistas desde el pico de Säntis.
Recuerda, en Suiza, como en la mayoría de países europeos, se conduce por la derecha. El límite de velocidad en áreas urbanas es generalmente de 50 km/h, mientras que en las carreteras fuera de la ciudad varía entre 80-120 km/h.
El área de Appenzell es compacta y a menudo puede ser ocupada, especialmente en temporada alta. Por lo tanto, te recomendamos que busques con anticipación posibles lugares de estacionamiento. Por suerte, hay varias opciones de aparcamiento a lo largo de Appenzell que puedes aprovechar.
El clima de Appenzell puede ser muy variable. Aunque el verano suele ser cálido y agradable, siempre es aconsejable empacar alguna prendas de abrigo para las noches más frescas. El invierno puede ser bastante frío y con nevadas, lo que puede hacer que la conducción sea un poco más desafiante.
En Suiza, la moneda oficial es el franco suizo (CHF). Muchos comercios también aceptan el euro, pero el cambio puede no ser ventajoso. Recuerda tener siempre a mano algo de dinero en francos suizos para pagos menores y en caso de que no puedas pagar con tarjeta.