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La capital de Gales, Cardiff, ofrece una mezcla impresionante de cultura, historia, y atracciones modernas. Además, se puede explorar cómodamente con un coche de alquiler.
La mayoría de las calles de Cardiff son amplias y cómodas para conducir. Un coche pequeño o mediano es ideal para recorrer la ciudad y los alrededores. Sin embargo, si planeas explorar las zonas montañosas de Gales, un vehículo todoterreno podría ser una opción más cómoda.
Cardiff tiene un sistema de transporte público eficaz, pero un coche de alquiler te permitirá mayor flexibilidad y la posibilidad de descubrir lugares más alejados. Hay numerosos aparcamientos en la ciudad, algunos de ellos gratuitos, aunque en el centro suelen ser de pago.
La ciudad tiene una rica historia celta y romana que se puede descubrir en el Museo Nacional de Cardiff. También es famosa por el castillo de Cardiff, una fortificación del siglo XI. Si prefieres deportes, Cardiff es una ciudad apasionada por el rugby, así que no te pierdas la oportunidad de visitar el Millennium Stadium.
En Reino Unido, la moneda es la libra esterlina (GBP). El precio promedio de la gasolina en Cardiff es de 1,26 GBP por litro y del diésel es de 1,31 GBP por litro. Puedes encontrar estaciones de servicio en toda la ciudad y alrededores.
Visita el vibrante barrio de la Bahía de Cardiff y disfruta de la vista panorámica de la ciudad desde la Noria del Agua. Si te gusta la naturaleza, el Parque Bute es un lugar ideal para pasar el día.
Recuerda que en el Reino Unido se conduce por la izquierda y el volante está a la derecha en el coche. El límite de velocidad en las zonas urbanas es generalmente de 30 mph (48 km/h), aunque puede variar. En carreteras de doble carril es de 60 mph (96 km/h), y en autopistas de 70 mph (112 km/h).